Nombre: Terraza Parrilla del Keoss
Dirección: C/Cadena, 5 - Buitrago de Lozoya (Madrid)
Tipo: Parrillada y mediterráneo
Menú diario: --
Web: http://keosspubbuitrago.blogspot.com.es/ (desactualizada)
Otros: El pueblo, castillo y la iglesia valen la pena.
Entramos en el restaurante tentados por la parrillada para dos personas por 25 euros... Nos sentamos los cuatro en una mesa y empezamos a mirar las cartas para ver que pedíamos. Yo me encapriché de unas empanadas argentinas (marlenys 2 unidades con 2 salsas 5 euros).
Pedimos también la parrillada, una ensalada mixta (5 euros) y unas patatas fritas con dos salsas (4,5 euros). La ensalada, las empanadillas y las patatas las pedimos como entrante, porque nos dijo el chico que la parrillada tardaría un poco en hacerse al estar todavía haciendo las brasas... Hasta aquí todo bien, pero en ese momento pasamos a ser invisibles...
No nos trajeron la bebida, ni las patatas ni la ensalada ni las empanadas, a los de nuestro alrededor (3 o 4 mesas) los iban sirviendo aunque habían llegado más tarde que nosotros. Pasada una hora, cuando casi nos íbamos a ir, nos trajeron la bebida y un poco más tarde toda la comida.
Como dice uno en Foursquare, la parrillada es escasita para dos personas, pero habíamos pedido ensalada y patatas para completar la comida... Lo malo: la ensalada estaba pocha, era un iceberg y tenia zonas marrones, casi no comimos nada y aunque en la carta ponía que las patatas venían con dos salsas las tuvimos que pedir, el camarero no nos las trajo.
La salsas chumichurri y la de mojo picón estaban muy buenas, y las costillas de la parrillada también estaban ricas.
El pueblo es muy bonito, al lado del restaurante están los restos del castillo (que pudimos visitar gratis y una arqueóloga nos explicaba lo que estaban haciendo y la vida en el castillo), el pueblo dentro de la muralla y una iglesia que el cura local reconstruyó con la ayuda de unos jóvenes conflictivos de una escuela de oficios.
Si vuelvo a ir al pueblo de turismo, intentaré probar la pierna de cordero lechal de un restaurante de la plaza...
Entramos en el restaurante tentados por la parrillada para dos personas por 25 euros... Nos sentamos los cuatro en una mesa y empezamos a mirar las cartas para ver que pedíamos. Yo me encapriché de unas empanadas argentinas (marlenys 2 unidades con 2 salsas 5 euros).
Pedimos también la parrillada, una ensalada mixta (5 euros) y unas patatas fritas con dos salsas (4,5 euros). La ensalada, las empanadillas y las patatas las pedimos como entrante, porque nos dijo el chico que la parrillada tardaría un poco en hacerse al estar todavía haciendo las brasas... Hasta aquí todo bien, pero en ese momento pasamos a ser invisibles...
No nos trajeron la bebida, ni las patatas ni la ensalada ni las empanadas, a los de nuestro alrededor (3 o 4 mesas) los iban sirviendo aunque habían llegado más tarde que nosotros. Pasada una hora, cuando casi nos íbamos a ir, nos trajeron la bebida y un poco más tarde toda la comida.
Como dice uno en Foursquare, la parrillada es escasita para dos personas, pero habíamos pedido ensalada y patatas para completar la comida... Lo malo: la ensalada estaba pocha, era un iceberg y tenia zonas marrones, casi no comimos nada y aunque en la carta ponía que las patatas venían con dos salsas las tuvimos que pedir, el camarero no nos las trajo.
La salsas chumichurri y la de mojo picón estaban muy buenas, y las costillas de la parrillada también estaban ricas.
El pueblo es muy bonito, al lado del restaurante están los restos del castillo (que pudimos visitar gratis y una arqueóloga nos explicaba lo que estaban haciendo y la vida en el castillo), el pueblo dentro de la muralla y una iglesia que el cura local reconstruyó con la ayuda de unos jóvenes conflictivos de una escuela de oficios.
Si vuelvo a ir al pueblo de turismo, intentaré probar la pierna de cordero lechal de un restaurante de la plaza...